Que tu vida discurra tan apaciblemente como un río.
Que tu despertar al día sea con alegría.
Que la espera de lo que buscas y deseas sea gozosa, llevadera... gratificante.

Gracias por visitar el blog. Un abrazo.

María José.

BEVERLY SILLS










Encontré un nuevo tipo de serenidad, una nueva madurez…
No me sentía mejor y más fuerte que nadie, pero ya no me parecía importante que todos me quisieran o no, ahora era más importante quererles yo a ellos.

Beverly Sills

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Es precioso. Solo eso, precioso.
Besos.
Limonchela.

María José dijo...

Hay personas que parecen que nacen para querer a los demás, ¿verdad? No sé, es como si de repente supieran que deben a hacer; y van a por ello, sin dudarlo.
Sí.¡Es precioso!
Un abrazo, amiga.

Anónimo dijo...

Me viene a la memoria alguna de ellas. Menos mal que están ahí.
Besos

María José dijo...

Sí, es bueno recordar lo que de bueno hay en nuestra vida y nos pasa.
¡Feliz semana, Anónimo!
Gracias por tu comentario.
Un beso.