Ahora que todo vuelve: el silencio y la espera
las palabras que hemos guardado en lugar seguro
todo este julio de viento y nostalgia.
Ahora que todo vuelve: la tibieza del cuerpo
aquietado y dócil bajo las manos amantes
y aquel perderse en las tardes tranquilas, bosque adentro,
por el tapiz crujiente de hojas de pino,
¿no es su valor este esfuerzo cálido
y el quererse con certeza a solas,
la dura voluntad de permanecer, presente
ausente a la vez,
sin pensar que el tiempo es un vacío sin límites?
Mujer: nada me cuesta decir tu nombre,
aunque estés lejos. Lo escribo en las piedras y el agua,
en la sombra acogedora de los árboles a la vera del río
y en el comedor de casa.
Sé que oirás mis palabras,
porque llevas en las manos el signo de un tiempo nuevo,
y has crecido en la esperanza
de que alguien lo aceptara sin hacerte preguntas.
Miquel Martí i Pol
2 comentarios:
Es preciosa la foto. Parece que va a salir algo de ahí detrás del puente. ¿Un barco? :)
El poema me transmite añoranza de que algo vuelva, no sé el qué.
Besos
Limonchela
¡Feliz fin de semana, amiga!
Me alegra que te gusten el poema y la foto.
Un beso.
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