Dime, niño, dime:
¿Por qué tú has venido?
¿No ves qué peligro corres
qué los malos acechan,
que las envidias hieren
a los que son bendecidos por muchos laureles?
¿Por qué tú has venido?
¿No ves qué peligro corres
qué los malos acechan,
que las envidias hieren
a los que son bendecidos por muchos laureles?
Yo vengo a sanar al mundo
que llora y grita
por no sentirse querido.
Yo vengo a sanar al mundo
de odios, guerras, rencores.
que llora y grita
por no sentirse querido.
Yo vengo a sanar al mundo
de odios, guerras, rencores.
Duerme, niño, duerme.
Todavía es pronto
Todavía es pronto
para hacer lo que dices.
Estaré aquí para velarte.
Te lo prometo.
Estaré aquí para velarte.
Te lo prometo.
Duerme, niño, duerme.
Duerme, niño, duerme.
Duerme, niño, duerme.
No hay comentarios:
Publicar un comentario