Que tu vida discurra tan apaciblemente como un río.
Que tu despertar al día sea con alegría.
Que la espera de lo que buscas y deseas sea gozosa, llevadera... gratificante.

Gracias por visitar el blog. Un abrazo.

María José.

LA DESESPERACIÓN DE UNA FAMILIA


Es triste lo que te voy a contar: 
Desde las nueve y media de la noche de ayer sábado miembros de la Guardia Civil, buzos y un helicóptero del Servicio de Salvamento buscan a un hombre que se cayó a la ría de Avilés con su furgoneta, después de haber colisionado con un coche conducido por una mujer que ha sido ingresada en el Hospital.
Hoy, fui a caminar. A la vuelta -sobre las dos de la tarde- aún estaban los buzos buscando a ese hombre.
No paro de pensar en su familia, en la desesperación en la que se deben de encontrar sin saber noticias de su paradero después de tantas horas de espera. 
Hay momentos y momentos duros en la vida; pero éste... éste es uno esos momentos por el que nadie nunca desearía tener que pasar. 

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